Victorinox Swiss Army aúna fuerzas con la marca escandinava Naimakka para introducir el paracord en el mundo de la relojería. Una primicia mundial. La correa, tejida a mano, despierta al aventurero que llevamos dentro.
El paracord, empleado en un principio en el cordaje de los paracaídas, cumple los rigurosos estándares del ejército estadounidense. Puede soportar cargas increíbles de hasta 250 kg. Esta cuerda de nailon está formada por una envoltura externa y siete hilos internos que, destrenzados, pueden servir para elaborar una red de pesca, reemplazar el cordón de un zapato o formar un arco de fuego para encender una hoguera. La correa puede transformarse para darle todo tipo de uso en cualquier situación imaginable.
El I.N.O.X. Paracord, auténtico y único, conoce ahora el éxito realzado de rojo, con correa y esfera del icónico color de la marca. La dedicación máxima.
El reloj I.N.O.X. Paracord, fiel al ingenio de Victorinox, está dotado de un protector «bumper»
transparente extraíble que lo protege de los arañazos y le confiere una marcada presencia. Además, también sirve de útil herramienta de navegación, pues tiene indicados los cuatro puntos cardinales. Su multifuncionalidad también se hace patente en la caja: es resistente a los golpes, sumergible y contiene una correa adicional de caucho.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS SWISS MADE
CAJA
Caja de 43 mm
Cristal de zafiro resistente a los arañazos, triple tratamiento antirreflejos
Corona de rosca protegida
Sumergible hasta 200 m (20 atm / 660 pies)
Fondo atornillado
ESFERA Y CORREA
Esfera monobloque roja
Agujas y marcadores con Super-LumiNova®
Hora militar en el realce
Ventanilla de fecha situada a las 4.30 h
Correa roja de paracord
MOVIMIENTO
Movimiento de cuarzo de fabricación suiza Ronda 715
Sobre I.N.O.X.: la esencia de Victorinox
Un reloj que encarna la historia de una marca pionera que crea objetos caracterizados por su máxima funcionalidad y por su calidad incondicional.
4 años de deliberaciones, 3 años de desarrollo, 6 meses de pruebas, 421 prototipos y 130 pruebas han establecido un nuevo estándar en el mundo de la relojería. Tres agujas y la fecha. Un bisel achaflanado, como esculpido con una navaja. Una esfera monobloque con un diseño pulcro. Una insignia de modernidad.
Esta aparente sencillez esconde una gran complejidad técnica y su estructura perfectamente equilibrada es robusta y se adapta cómodamente a la muñeca. Hecho para durar, desafía la obsolescencia programada. Su perfección raya la obsesión, su eficacia es el material del que están hechos los récords.
I.N.O.X. es el reloj de toda una vida. Adecuado a todos los momentos. Sencillamente atemporal.
